El modelo de cambio de microarquitectura Tick-Tock de Intel se ha encontrado con un serio rival con el complejo proceso de producción en 10nm, un proceso de fabricación que ya fue pospuesto inicialmente a al tercer trimestre del 2017 y que ahora se retrasa nuevamente hasta inicios del 2018.
Parece que con los próximos Cannonlake, inicialmente programados para este 2016, la ley de Moore va a necesitar una nueva ampliación ya que Intel está teniendo nuevos problemas de plazos como los que ya tuvo con sus Haswell. La fábrica de Kiryat Gat (Israel) será la encargada de la producción en 10nm, en alrededor de 2 años gracias a la inversión programada de 6 billones de dólares, aunque seguramente este no va a ser el último retraso que veamos en los planes de fabricación Intel. Todo apunta a que vamos a tener que esperar bastante para ver los procesadores en 10nm de Intel en el mercado, aunque quizás veamos antes las pastillas de TSMC o Samsung que esta vez pueden le pueden pasar por delante a Intel.
Como siempre…. Intel se retrasa